Domingo 3 de Junio de 2012,
de esta fecha no me olvido nunca más.
Salimos con Tefy desde Casabó, pasamos
a buscar a Pablo, Pato y a Marcos para completar el grupo con el Inge Ricardo.
Nos dividimos en dos coches como
estaba previsto y partimos hacia la Sierra de las Ánimas con la ansiedad de
siempre cuando vamos a una carrera.
Cuando aún nos faltaba media hora para
llegar, nuestro guía (el mosquito) nos llama para preguntarnos por donde se
entraba a la largada, nosotros no sabíamos, pero el con toda su buena
voluntad busco el lugar de largada y llegó, llegó media hora después que
nosotros porque se perdió.
Después lo de siempre, la cola para el
baño (tod@s) y con Pato fuimos a
retirar el Kit, demoraron tanto en entregarnos el kit, que cuando nos estábamos
vistiendo se largó la de 9 (la nuestra). De cualquier manera con Pato
arrancamos con la de 9 pero como se habían ido y no sabíamos para donde era, nos
dimos vuelta y nos prendimos con la de 21 k. Nuestros chip estaban marcando
para la de 9 y estábamos corriendo los 21 (relajo total).
A pesar de mi joven edad y mi magnífica
preparación física, me empezó a doler la rodilla, por lo que le pedí a Pato que
siguiera porque yo abandonaba, se quiso quedar conmigo, pero la hice seguir.
Me quede sacando fotos al pelotón
y aparecieron Libertad, Mauri y el Mosquito que me dieron manija para que
los siguiera (a esa altura nuestros elite Pablo, Ricardo, Marcos y Stephy ya estarían en la mitad del recorrido ja ja..
Bueno, recorrimos
unos 3 k y nos adentramos en las Sierras, ¡para que!, a los 500 metros de estar
en la subida del cerro ¿que pasó? A ver, adivinen!!! Se me trancó la
rodilla!!!!! ja ja ja!!! La cara de Liber y Mauri era un poema, pensarían
¡¡para que trajimos a este viejo de m....!!!! ja ja. Le dije al Mosqui que
siguieran y como siempre se negó rotundamente. Hice la maniobra de
"destranque" y seguimos adelante. Todo lo que imaginaba de la Sierra
de las Ánimas es poco después de vivir la realidad. Más allá de los
caminos que son estrechos, pedregosos, resbalozos y otras yerbas, es naturaleza
pura.
Cuando íbamos
trepando gallardamente por un sendero barroso ¿que paso? A ver, adivinen!!! Se
me trancó la rodiiiillaaa!!! Ta, la destranque y seguimos. Bueno, esto se va
muy largo; seguimos con el recorrido, llegamos a la cima del cerro y el paisaje
fue maravilloso. Era terrible el viento frio, pero seguimos adelante porque los
de elite ya estaban cerca, (cerca de acostarse a dormir la siesta en sus casas
porque hacia como 2 horas que habían llegado). Y así cruzando cascadas, vadeando
arroyos, patinando en el musgo y el barro, clavándonos espinas, tropezando y
jadeando llegamos a Ruta nueve, faltan 3 k, los hicimos trotando (trote de
confort) y llegamos a la meta. Una multitud nos esperaba, era emocionante! La
multitud eran 5 compañeros de fierro de Trotancap, la muchacha que entregaba
las medallas y los que estaban desarmando todo, (nos dejaron el arco de llegada
para no desalentarnos).Después con mucho frio emprendimos el regreso.
Fue una jornada hermosa junto al grupo de los
Trota ,como siempre solidarios 100x100.
Mi agradecimiento especial a Liber, Mauri y El
Mosquito por el aguante que le hicieron a este veterano.
Esto para mi ha sido una experiencia
¡única! Única porque yo no la corro ¡nunca más!, pero los que la puedan correr
en alguna oportunidad que lo hagan ¡¡¡VALIÓ LA PENA!!!.
Fue una crónica larga, pero puse lo que
sentía.
Un abrazo a Stephy, Pato, Pulpo, Marcos, El
Inge, Liber, Mauri y Mosqui.
¡¡¡GRACIAS POR REGALARME ESTE SUEÑO!!!
Daniel