Desde hace varias
fechas vengo ausente por mi bendita
rodilla derecha, la misma que me ausento del fútbol y que tanto agradecieron
los rivales así como mi viejo, que pedía a los DT que me sacaran antes de que
me echaran los jueces de los partidos.
Así fue que para
ver si aguantaba me anote en la BBVA 7K, con distintas tareas y viaje de por
medio en la semana no pude chequear
cuantos Trotas se habían anotado, sabía sí que Cristina (Fabra) iba a estas
participando y bueno así fue que el domingo tempranito arranque pa’ la rambla.
Por
suerte acompaño un radiante sol y aunque un poco ventoso daban ganas de
arrancar y probar la rodilla. Nos
encontramos entre otros con amigos ex
estudiantes de la querida UTU del Cerro y arrancamos todos juntos el
calentamiento, muchos más divertidos y visualmente atractivos que los de
Richard, ya que la profe (fuerte como cadenazo en los dientes) y la música lo
hicieron muy ameno, ahí calentamos y estirando entre bailoteos meneando las
caderas !!!
Bueno
llego la hora de la largada uno siempre mirando y tratando de encontrar algún
otro Trota por ahí, pero entre tantas rubias, morenas, morochas, pelirrojas,
lampiñas, etc., etc. no puedo dar fe que le dedique el 100% en visualizar algún
compañero, pero la intención estuvo.
Arrancamos
en un mar de remeras blancas con viento en contra de a ratos, pero se hacía
soportable ya que el clima ayudaba bastante, así fuimos quemando metros, estos metros
se sumaban en km y cuando nos quisimos dar cuenta ya estábamos pegando la
vuelta en las canteras, mitad del recorrido.
Recorriendo
los últimos 3,5 km seguimos buscando algún trota, pero nada solo veía calzas
negras, azules, rojas, blancas (mis preferidas) a esa altura ya no importaba si
eras rubias, morenas,… pero no
encontraba a ningún compañero
Ya
llegando a la metas solo podía ver solo los championes ya que me venía casi
arrastrando, pero llegué!!! casi sin
poder respirar, la rodilla? a esa altura
no sabía se tenía piernas, miro el reloj estaba en 45” restando el 1.30” de
salida metí el promedio que hago en los 10K.
Obviamente
cuando llegue recibí el aliento de Cristina que había pasado la meta media hora
antes, pero me dio para adelante y que había hecho buen tiempo, una amiga.
Bueno
queridos amigos así les relato la participación de estos dos trotas y como el
título dice: “siempre algún Trota va a estar”, aunque no sea un digno
representante como yo en esta oportunidad, pero ahí estuvimos, saludamos a
varios colegas de otras agrupaciones los que preguntaron por la gran barra.
Un
gran abrazo para todas y todos.-