Se nos vino la 9ª etapa de la AAU y nada mas ni nada menos que en Florida, pueblo en el cual disfruté muchas de mis vacaciones junto a mi familia materna.
No era una etapa más para mi, recorrer esas calles, ese Parque Robaina, traía muchos recuerdos.
El equipo de los TROTANCAP iba menos numeroso ésta vez, la Selección nos había quitado jugadores, (en realidad se nos escaparon para Bs As) y otros faltaron con aviso por problemas de salud o actividades particulares.
Como de costumbre, en la semana previa ya estaba todo organizado, desde el bus (ésta vez tenía baño y si no falla la logística para los próximos también) hasta la fruta y la heladera con agua que siempre trae el luchador incansable (léase Daniel).
Amaneció con una cerrazón que indicaba que en cuanto saliera el sol, se transformaría en un día espectacular. Y así fue.
De a poco fueron llegando a Oficinas Centrales de ANCAP y ésta vez salimos en hora, 08:30 Hs (olvidé comentar que Richard no fue y que Anibal se pensaba que salíamos a las 8).
Tomamos la ruta y enseguida aparecieron los mates para comenzar con la previa, donde siempre se intercambian temas en post de la mejora del equipo.
Al llegar a La Paz, ocurrió todo lo contrario, se terminó la tranquilidad, subió Charly y despertó a quienes intentaban seguir con sus sueños a cuestas.
Antes de llegar a Florida, se le hizo entrega a Leticia de un Pergamino con una leyenda redactada por Isabel que me tocó leer (no me dejaron ni estudiarla, cuando arranque a leerla me di cuenta que estaba en rima, hice lo que pude), con motivo de que el miércoles 20 se recibió de Escribana. Vaya desde aquí mis saludos y augurios de éxitos.
Llegamos a Florida y el conocer el lugar tiene sus ventajas, el bus quedó muy bien ubicado, cerca de la largada y pronto para salir.
Todo se desarrollaba muy rápido, nadie quería demorar, a las 16 jugaba Uruguay y había que retornar en seguida.
La eterna discusión, que si remera térmica si o no, al final, casi todos las dejamos en el bus, el sol comenzaba a sentirse.
Se largó en punto, un calentamiento previo del equipo, que dejó muy en claro que no estaba Richard, faltaba el organizador, pero se hizo lo que se pudo, jajajajajaja.
Largamos y ya en el Prado los repechos comenzaron a decirle a las piernas que no se regalaran, que no sería tan fácil.
Aparicio Saravia se despachó con dos repechos que no terminaban nunca, lo que hizo que la caravana de corredores se comenzara a estirar cada vez más, e hizo interminable la pasada de corredores por Independencia, la calle principal de la Ciudad de Florida..
El pueblo floridense acompañó desde las veredas, y no faltó algún familiar que alentara desde las mismas.
Fueron dos vueltas, todo sucedió muy rápido, llegamos tomamos agua, estiramos, sacamos la foto con las banderas (esa no se las perdono ni estando apurados), nos cambiamos, y a la ruta.
Todos contentos, ningún lesionado, las bolsas de fruta que iban y venían, y ya planeando el próximo domingo en Durazno.
Una jornada que terminó con los padres junto a sus hijos en su día, y con el triúnfo de Uruguay en tierras vecinas.
Nos estamos viendo en Durazno
Un abrazo
José
